Por: Ivette Monserratt Porras Ramírez - @indiexmonse
Ese viernes llegue temprano de la escuela a mi casa, me acompañaba mi ex novio teníamos 17 dolorosos días de haber terminado una relación de 2 meses, mis papás lo habían invitado a pasar la noche con nosotros, y la verdad yo no entendía el porqué.
En fin, llegue y todos estaban ahí, papá mamá, primo, hermana, cuñado y sobrino, yo venía cansadísima de la escuela, después de 7 largas horas en que mi cerebro estuvo procesando mucha información lo único que quería era descansar, sin embargo, mi mamá me pido cambiarme de ropa porque íbamos a salir, me imagine que iríamos a cenar tacos o hamburguesas como anteriormente lo hacíamos.
Nos subimos a la camioneta de mi papá y me quede dormida durante el viaje, mi ex me despertó cuando habíamos llegado, no sabía donde era pero al parecer era muy lejos porque sentí que dormí mucho, caminamos rumbo a una plaza, yo venía hundida en mis pensamientos, pensaba en todo y en nada a la vez, estaba triste pues a un lado tenía un ex novio el cual me había lastimado y aunque lo quisiera mucho, tenía un rencor muy grande hacia él.
Llegamos y de repente me llego un sms de mi mamá a las 12:00am en punto, cuando lo leí decía “Te amo hija, disfruta tus 16 años”, mis ojos se nublaron con lagrimas y cuando voltee a verla, estábamos rodeados de mariachis que comenzaron a tocar las mañanitas, inmediatamente las lagrimas rodaron por mis mejillas ya que desde pequeña había querido conocer La Plaza Garibaldi, pero nunca me habían podido llevar, además que siempre me han gustado los mariachis. Todos comenzaron a abrazarme, y a decirme muchas cosas que me hicieron muy feliz, pero lo que en verdad lo que mas me gusto fue que mi ex me pidió perdón por el motivo el cual habíamos terminado, me dijo que me amaba y que había sido un tonto al hacer lo que hizo, lo perdone y ahora gracias a ese cumpleaños que fue el de la reconciliación llevo casi dos años de una hermosa relación con él.
Pero eso no fue todo, salimos súper ebrios de Garibaldi como a las 5 de la madrugada, después de regresar a casa y dormir un rato, mi hermana me despertó y me dijo que teníamos que ir por mi otro regalo, me levante y fui hacia donde mi hermana, mi cuñado y mi novio me llevaban, y llegamos a un estudio de tatuajes, pues otra cosa que quería era tatuarme un diseño que yo misma había hecho, al principio me dio miedo porque mi mamá nunca me lo hubiera permitido, pero gracias a mi hermana mi mamá acepto que me lo hiciera, en fin, en ese cumpleaños también termine con un bello tatuaje en la espalda.
Y de lo único que yo estaba enterada era de una fiesta con mis amigos de la escuela, lo cuales llegaron en la noche con pastel, y Appleton (que me encanta), y nos pusimos a disfrutar de lo que sobraba de mi cumpleaños. (Termine más que ebria)
Sin duda el 30 de agosto del 2008 fue el mejor cumpleaños de mi vida lo disfrute inmensamente, fue una recompensa de todo lo malo que había vivido meses atrás, y aun sigo agradecida por lo feliz que fui, y mis mejores regalos fueron: mi familia unida por 1ra vez, mis amigos apapachándome y un amor el cual hasta el día de hoy sigue creciendo y de que espero que nunca me vuelva a fallar. Ojalá que disfruten la historia tanto como yo la disfrute y espero que este cumpleaños que viene sea igual o más hermoso que el de esta historia…
Amor, Paz y Éxito para todos.
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